sábado, 20 de junio de 2009

Entevista de trabajo. Historia de un gilipollas con traje

Allí estaba yo, sentada en una silla de una sala de reuniones en un edificio cercano al de mi centro de trabajo pero que pertenece a una empresa distinta, concretamente a uno de los competidores directos de mi actual empleador. Al otro lado de la mesa un hombre alto y de traje me interroga sobre mi experiencia laboral. Total, no tengo nada mejor que hacer y ellos tienen aire acondicionado, y en la calle hace mucho calor.

Era Dios Engreído, el director de recursos humanos de la competencia. Le acompañaba otro de los gerifaltes de ChupiCorp. Estaban muy interesados en mis servicios y me según ellos me ofrecían mucho dinerocifra que no desvelaron en ningún moemnto, pero no tengo claro si lo hacían por mis habilidades o porque saben que tengo mucha información sobre mi actual empresa.

- Empecemos por el principio. ¿Estás trabajando actualmente?
- Si, joder,ya lo sabes.
- Lo siento, tengo que hacerte todas las preguntas. ¿Cual es tu dosponibilidad para incorporarte?
- 15 días laborables, pero si me mandan a la calle inmediata.
- ¿Tienes expectativas de que te echen?
- Me gustaría, para que me pagaran la indemnización, pero cada día es más improbable.
- Que graciosa.
- Ja, ja. - Le refuerza en su risa el hombre que le acompaña y que se ha presentado pero no tengo ni idea que cojones pinta en la reunión.

- Va en serio.
- Si es que me mondo con esta mujer.
- De acuerdo, para vosotros la perra gorda.
- Quien es la Perra Gorda.
- La secretaria de uno de mis jefes y hasta ahí puedo decir, lo demás es confidencial.
- Veo que eres celosa con el secreto profesional.
- Mucho, soy la empleada que tiene más acceso a toda la informción de mi actual compañía y de la mayoría de filiales.
- Eso es mucha responsabilidad.
- Si quieres que sea igual de responsable con vosotros pagádme por ser así de celosa.
- Bueno,de la pasta hablamos despues.

Asquerosos expertos en recursos humanos, como se rilan a la hora de insinuarles que es su turno de enseñar el dinero...

- ¿Tienes alguna enfermedad que sea relevante que conozcamos?
- Una tremenda alergia.
- ¿Alergia a qué?
- Alergia a los gilipollas y a que me entretengan con preguntas estúpidas.
- Cuales son tus funciones en SlaverCorp.
- Malabarista.
- ¿Cómo dices?
- Que mi trabajo es un puñetero circo, malabares mal pagados y los hago rodeada de payasos.
- Aquí te pagaremos mejor.
- ¿Cuánto mejor?
- Eso ya se verá. Ahora en serio, a que te dedicas en SlaverCorp.
- Oficialmente soy archivista pero en la practica soy formadora de becarios, doy cursos de reciclaje a los compañeros, enseño a que pinchar con el ratón en la pantalla no es pulsar con el ratón sobre el cristal del monitor, imparto disciplina paa que la gente trabaje, hago tareas de aprovisionamiento y compras, marketng, fuerza de ventas, publicidad, recursos humanos y casi casi de dirección.
- ¿En serio haces todo eso?
- Bueno, más o menos, casi nadie sabe hacer su trabajo.
- Ya será menos...
- Cuando quiera le cambio el despacho y usted mismo lo comprueba.
- Que graciosa.
- Pues si ahora se ríe cuando yo cuente un chiste se muere asfixiado por la risa.

De verdad estos tipos me desesperan, en este país se valora demasiado a quien lleva un traje, desde luego más de lo que se merecen.



-Te estamos ofreciendo un contrato muy jugoso.
- En eso estamos de acuerdo.
- Entonces cual es el problema.
- Que en mi contrato actual tengo una clausula específica que me impide aceptar un contrato vuestro.
- ¿Entonces a que has venido aquí?
- Porque hay aire acondicionado y el de mi casa está estropeado.
- Que graciosa.
- Va en serio, las tendas donde voy a ir de compras luego ahora están cerradas, así que hago tiempo aquí. Y ya puestos averiguo para que me has llamado.
- Te he hecho venir para ofrecerte un contrato.
- Pensé que querías invitarme al cine, ahora si que me has decepcionado. Ahora en serio, ¿necesitas alguna de mis habilidades o quieres mis conocimientos sobre el mayor competidor de tu empresa?
- Por algunas de tus habilidades, obviamente, aunque si podemos sacar provecho de tus conocimientos mucho mejor. Así de paso les enseñamos a esos de SlaverCorp como nos las gastamos aquí.
- No lo veo viable. No podéis contratarme, en virtud al acuerdo que tenéis firmado con mi empresa tiene que pasar un mes antes de que pueda ofreceros mis servicios profesionales.
- SI QUE ES VIABLE, te vas un mes al paro y te contratamos nosotros.
- PFFFFF MGHH,MGHH (aguantaba por no escupir mi propia saliva con la que casi me atraganto). Una nausea repentina hace que casi me ahogue. ¿Por qué no me habría traido yo el cubo para vomitar agusto sin poner perdida lamoqueta verde?.

Será cupullo Dios Engreído. Se cree que como director de recursos humanos es el puto Cristiano Ronaldo de las negocioaciones. El puñetero Florentino Pérez de las contrataciones e incorporaciones y que nadie le puede decir que no. Joder, ni que ChupiCorp sea IBM joder, ni siquiera es rival en volumen de negocio para Chupifónica, Killminds, Tecnomierdas o el Corte de Mangas, al menos no en este país. Y tampoco es una empresa que conozca todo el mundo, es de las grandes, pero al ofrecer sevicios profesionales a otras empresas el público general no las conoce.

- Tu si que eres gracioso.
- Va en serio.
- Vosotros ganáis y yo pierdo por partida doble. Es que no me interesa ni el trabajo que tengais para ofrecerme.
- No entiendo por qué partida doble. La oferta que te hago es cojonuda.
- Cojonuda para vosotros. Si me voy al paro y no me contratas me quedo en la puta calle y el principal competidor de tu empresa pierde un empleado. Si me contratas le quitas un empleado a la competencia y además le integras en la tuya, un dos por uno. Debe ser por eso por lo que dices que es cojonudo.
- Pero si tiene muchas ventajas para ti.
- Dejate de gilipollecen estilo padrino en plan "Te voy a hacer una oferta que no vas a poder rechazar" porque te la estoy rechazando.
- Pero no puedes.
- Ya lo he echo, angelito, Arrivederci.
Y encima habla italiano...
-Ahora me marcho y me olvido de decirle a mi empresa que estás intentando romper el convenio que tu empresa tiene con ella en la que se comprometen a no quitarse trabajadores mutuamente. Y de la chapuza de cogerme el paro para que no se considere robar empleados si te parece cojonuda la pruebas tú, que para algo conduces un A6 de color verde oscuro metalizado.

- ¿Como sabes...?
- Joder, que no es un secreto, Vas de dios engreido por la vida ostentando de buga.

(Yo ya estaba cogiendo el ascensor dispuesta a quemar la tarjeta (de empresa) gastando dinero en compras personales.

3 comentarios:

  1. Estimada pecorilla: Lo que comentas de los trajes me ha llegado. Es curioso cómo para trabajar en algunos sitios lo primero que hacen es arrimarte un traje. Tal vez no sepas ni el día que naciste, pero es igual. Lo importante es que parezcas un empresario adomingado, el resto vendrá solo. Por cierto, hay de aquel que como no se ha puesto un traje en la vida (como yo) igual se pone la corbata en los sobacos.

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  2. Es cierto que en este país se valora demasiado un traje. Todos los comerciales suelen llevarlo, y luego te intentan timar o no saben lo que venden y lo mismo los directores y ejecutivos.

    Les preguntas lo que sea y suelen tener que preguntar a subordinados que saben más de la cuenta del ejecutivo que el propio ejecutivo, pero así es el país.

    Si cuando vamos a un sitio pidiéramos que nos atendiera un friki greñudo al que le apasiona lo que hace otro gallo cantaría.

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  3. Buá! Ayer me crucé con un señor de unos cincuentaytantos, todo trajeado y maqueado... y al cruzarme con él, se tiró dos pedazo de cuescos de órdago!!! Como yo, aunque no vista trajes, soy muy educado, le contesté: "Que aproveche!" Pero el muy ruin ni siquiera me dio las gracias!!

    Está visto, que por debajo de trajes, títulos nobiliarios y posiciones sociales a todos se nos mueven las tripas.

    Llevar traje no te hace mejor persona ni un ser superior.

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A las pecorillas nos gustan los cotilleos y la polémica, así que nútreme con tu opinión.